Rafa, el muchacho de 1999

GUADALAJARA, MEXICO - DICIEMBRE 22: Rafael Marquez nuevo refuerzo del Atlas durante su presentación en el Estadio Jalisco el 22 de Diciembre de 2015 en Guadalajara, Mexico. (Foto: Alfredo Moya/JAM MEDIA)
GUADALAJARA, MEXICO - DICIEMBRE 22: Rafael Marquez nuevo refuerzo del Atlas durante su presentación en el Estadio Jalisco el 22 de Diciembre de 2015 en Guadalajara, Mexico. (Foto: Alfredo Moya/JAM MEDIA)

Una de las finales más emotivas del futbol mexicano tuvo como protagonistas a Toluca y Atlas en el Verano '99. La disputa por el título puso frente a frente dos equipos con estilos que gustaban y agradaban; Enrique Meza y Ricardo La Volpe fueron los directores técnicos encargados de moldear generaciones que se convirtieron en entrañables debido al futbol que practicaron. Bueno, retornemos a dicha final para hablar de Rafael Márquez.

[TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR: Los técnicos que nunca desaparecen del futbol mexicano]



Entonces joven rojinegro, Márquez ya era visto como un futbolista respetable debido a sus capacidades como defensa central, tanto que ello le valió para ser observado con atención en Francia y así partir al balompié europeo en la Ligue 1 con Mónaco. Previo a abordar el vuelo que serviría como ruta inicial para convertirse en un mexicano triunfador en el extranjero, 'Rafa' logró devolverle a la afición atlista una sensación que parecía mito: la piel chinita por acariciar un campeonato.



La última vez que los Zorros estuvieron cerca de hacerlo fue en la temporada 1965-66 cuando se quedaron a dos puntos del campeón América, que se coronó por ser líder general (la Liguilla todavía no hacía acto de presencia). Con el pasó del tiempo muchos aficionados se hicieron viejos, pero otros tantos llegaron al mundo para coincidir en un sentimiento, así como en una ilusión: ver a su equipo alzar el trofeo de número uno.



Durante el juego de ida en aquella final, Márquez hizo el tercer gol de su equipo, lo que significó un empate a tres goles en el marcador. El festejo de su anotación obsequió una estampa novedosa para los futboleros que no precisamente somos atlistas, sin embargo apasionados del balón: a través del televisor vimos un Estadio Jalisco convertido en un monumento a la locura con base en puros gritos eufóricos y banderas atlistas. Por primera vez supimos con creces lo que representa una alegría para una afición acostumbrada al sufrimiento. Por si fuera poco, ¡qué gol! El cabezazo de 'Rafa' fue de primer nivel; conectó y giró con elegancia para mandar el balón a la red. Lo hizo en una final, rasgo que viste aún más su manto de estrella. En fin.

Casi 15 años después, el muchacho que hizo vibrar al Jalisco con la mitad de un sueño retorna transformado en un veterano con cuatro Copas del Mundo a cuestas, entre otros tantos éxitos en su andar, para intercambiar posiciones con una afición que le manifiesta el agradecimiento por un elemento importantísimo en el futbol, sentir. Ahora es Márquez, así lo ha declarado, quien tiene la piel chinita al expresarse del sentimiento llamado Atlas.



[TAMBIÉN PUEDES VER: El sabor mexicano en Andorra ahora es amargo]

Y ha regresado con el deseo de completar el sueño.